El aumento del volumen de mercancías a manipular y las necesidades de construir almacenes auxiliares locales trajo como consecuencia la construcción de grandes superficies de almacenamiento centralizado, que permiten manipular cargas con equipos sofisticados optimizando la superficie y el volumen utilizados.

Dentro del almacén central, normalmente se realizan operaciones de entrada de paletas completas y operaciones de salida, bien de paletas completas sin cambios o bien después de operaciones de picking.

Las alternativas de manipulación en cuanto a equipos no son muchas y la mayor parte de las veces la elección de un equipo está condicionada más por la instalación en sí que por las especificaciones de la mercancía a manipular.

El transelevador es el equipo idóneo cuando se concibe un almacén con pocos pasillos -3 a 5-, de gran longitud -más de 50 m- y elevaciones superiores a 15 m -normalmente 20 m-. En estos casos y siempre que tanto las entradas como salidas se realicen con paletas completas, las operaciones se realizan con gran celeridad y rendimiento.

Carretilla de gran altura

 

Sus limitaciones principales son:

- Los tiempos precisos para efectuar cambios de pasillo de trabajo, son considerablemente superior a otros equipos.

- Poca adaptabilidad en cuanto a cambios de sistema de trabajo en el almacén.

- Imposibilidad de trabajar con otro equipo suplementario en caso de avería en el mismo pasillo de trabajo, por las dimensiones de los mismos y por la obra civil de anclaje del transelevador al pavimento.

- Equipos sin flexibilidad ni autonomía fuera del pasillo de trabajo. Sólo trabajan dentro del pasillo y no pueden recoger unidades de carga del suelo.

- Elevado coste de instalación. Estanterías reforzadas con soportes verticales, obra civil importante, etc.

 

 

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